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11 Abr 2017

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¿Qué es un Servidor Privado Virtual (VPS)?
por nvhosting

Un Servudor Privado Virtual o VPS  es la forma de conseguir la independencia que ofrece un Servidor Dedicado por menos dinero. ¿Cómo se consigue? Si miramos los recursos (memoria, cpu, disco) de diez servidores al azar en un mismo momento, seguramente descubramos que entre todos no llegan a consumir los recursos que ofrecería una sola máquina.

Cada vez que un Servidor está funcionando por debajo de su capacidad máxima, que es la mayor parte del tiempo, su potencia de cálculo, su espacio en discos y su memoria son inevitablemente desperdiciados. También se desperdicia toda energía necesaria para mantener el equipo en funcionamiento, aunque no haga nada: alimentación, ventiladores, motores de discos, circuitería, aire acondicionado…

Gracias a la tecnología de virtualización, podemos poner estos diez servidores dentro de una única máquina, más potente, capaz de distribuir los recursos de manera equitativa, permitiendo que estos servidores funcionen con normalidad. Al hacer esto, el aprovechamiento de los recursos de la máquina es óptimo, lo que permite obtener un mejor precio asociado al espacio, al coste del servidor y al consumo energético.

Cada Servidor Virtual dispone de unos recursos reservados y puede, incluso, disponer de más capacidad durante los momentos de mayor carga siempre que estén libres en el servidor físico. Es la ventaja de compartir una máquina más potente: La probabilidad de que todos los Servidores Virtuales VPS necesiten los recursos al mismo tiempo es estadísticamente muy baja, y por tanto nuestro Servidor Virtual podrá hacer uso, en muchas ocasiones, de la capacidad de un potente servidor.

Además, la memoria de base que consume un Servidor Virtual VPS es menor que la de un servidor físico, ya que el espacio ocupado en memoria por los programas idénticos, cargados en la memoria de todos los servidores (apache, mysql,….) sólo se ocupa una vez.

Por supuesto, un Servicdor Dedicado, o con un Servidor Cloud de superiores recursos dará un rendimiento mayor en cualquier momento, y por eso este tipo de servidores está recomendado para tareas que requieran elevada potencia de cálculo o grandes cargas del servidor por tiempos continuados. Sin embargo, un Servidor Virtual puede realizar, en la mayor parte de los casos, tareas que requieran la misma, o incluso más, potencia que un Servidor de gama baja.

Con este tipo de servidores ahorrará dinero mientras contribuye a reducir la huella de carbono en la atmósfera, dividiendo la cantidad de servidores físicos encendidos y la potencia de frío necesaria para mantenerlos refrigerados.




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11 Abr 2017

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Cómo diseñar una página de inicio efectiva para tu web
por nvhosting

Dos segundos es el tiempo que necesita el usuario que llega a tu página de inicio por primera vez para formarse una opinión sobre tu web.

Si el primer impacto ha sido positivo te habrás ganado otros siete segundos para que escanee toda la homepage y decida si sigue navegando por tu sitio o si se marcha por donde ha venido.

Así que nueve segundos es lo que tienes para seducir a tu visitante y convencerle de que ha llegado al lugar adecuado, de ahí la importancia de hacer una página de inicio efectiva.

Piensa en ella como en el escaparate de una tienda física, en cuanto echas un vistazo a través del cristal sabes si te gusta o no lo que ves. Si tu primera impresión es negativa esa tienda ya puede darte por perdido.

Mucha gente compra una plantilla y empieza a meter todo el contenido que se le ocurre en la homepage sin estrategia alguna, no reflexionan sobre dónde ubicar cada elemento, qué cantidad de texto van a meter, qué pretenden conseguir… y luego nos quejamos de que la web no nos está dando los resultados que esperábamos…

Página de Inicio estática vs entradas del blog

Esta duda me la plantean muchos lectores ¿Qué pongo, una página de inicio con mis últimas entradas del blog o una página tipo landing? ¿Qué es mejor de cara al SEO? ¿Si soy una empresa que me conviene más?

Aquí no hay una respuesta acertada para todo el mundo. En la primera versión de mi web la página de inicio era tipo landing, luego pasé al formato blog y ahora vuelvo a tener una página estática.

Si tu blog tiene mucho tirón y el objetivo de tu web no es vender servicios o productos opta por el formato blog.

Si eres una empresa o emprendedor que vende algo, ya sean productos o servicios te recomiendo que optes por el formato landing, más que nada porque esta página de tu web será una de las que más visitas reciba, así que deberías aprovecharlo para conseguir conversiones. De esto te hablo más en el siguiente apartado.

Y en cuanto al SEO decirte que en la página estática tienes más control sobre todos los textos, los h2, etc. Si es tipo blog esos contenidos irán cambiando según vayas publicando entradas y unas veces te favorecerán más que otras.

De todas formas piensa que puedes optar por una fórmula mixta en la cual tienes una página estática con un apartado dedicado a tus últimas entradas. Esta estrategia es interesante porque le da visibilidad a tus entradas, el usuario ve de qué hablas en tu blog en un instante y además estás aportando más contenido relacionado con la temática de tu web, con lo cual estarás favoreciendo que Google vaya posicionando los términos relacionados con tu negocio.

Solo una advertencia. Si pones aquí tus entradas que sea solo un breve extracto de las mismas, si se muestra demasiado texto puedes generar problemas de contenido duplicado.

La página de inicio tiene un único propósito

En tu opinión ¿Para qué crees que sirve la página de inicio de una web? Te doy varias opciones:

  • Debe ser un resumen de todo lo que puede encontrar el visitante en el sitio.
  • Debe informar a tus clientes de los servicios que pretendes vender.
  • Debe crear una primera impresión positiva mediante un diseño atractivo.

¿Cómo lo ves? ¿Te decantas por alguna de ellas? Porque si es así siento decirte que estás cometiendo el mismo error que comente la inmensa mayoría de emprendedores que hacen su propia web.

Te voy a poner un ejemplo muy concreto. Muchos diseñadores gráficos se esfuerzan en tener una página de inicio muy visual, donde sus diseños toman todo el protagonismo con la esperanza de que el potencial cliente caiga rendido ante la calidad de los trabajos que se muestran.

¿Por qué no es una estrategia adecuada? Porque el diseñador se está centrando en sí mismo, en sus cualidades y en los trabajos que considera mejores.

Pero ¿Y si el cliente no tiene ni idea de diseño? ¿Y si no sabe distinguir entre un trabajo normalito y uno de alta calidad? ¿Y si no llega a comprender cómo puede ayudar el trabajo del diseñador a su negocio?

En ese caso llegará a tu web, dirá “sí, muy bonito” y se irá porque no has sabido explicarle cómo puedes ayudarle.

El propósito principal de toda página de inicio debe ser conseguir que tu visita realice alguna acción en tu web. Recuerda la comparación con un local físico, la página de inicio es un escaparate, luego queremos que entren en nuestra tienda.

¿Qué tipo de acción queremos que haga? Eso ya lo decides tú, puede ser que te deje un email, que realice una compra, que te contacte via email, que lea una entrada de tu blog, etc. O como mínimo que hayas captado su atención y siga navegando hacia otras secciones.

¿Crees que vas a conseguir todo esto hablando de ti y de lo bueno que eres? Ya te digo yo que no. En la página de inicio tienes que mostrar a tu cliente potencial cómo puedes ayudarle a solucionar su problema.

En el caso del diseñador que te estaba poniendo como ejemplo, sería mucho más efectivo explicar cómo sus servicios pueden solucionar los problemas que pueda tener el cliente.

Si solo muestras tus mejores diseños (y ten en cuenta que el gusto es subjetivo) estarás hablando de ti, de lo bien que diseñas y de lo bueno que eres en lo tuyo, cuando deberías estar hablando del cliente, de los problemas que tiene y cómo puedes ayudarle a solucionarlos.

El primer error que comete mucha gente en su página de inicio es centrarse en lo que quieren que el cliente lea, cuando deberían centrarse en lo que el cliente necesita.

Tu visitante no quiere escuchar lo que tú le quieras decir, quiere escuchar que tienes la solución a su problema.

Si consigues convencerle de que tienes una solución para él, estarás mucho más cerca de que realice la acción que buscabas y por tanto de que tu homepage haya cumplido con su cometido.

El contenido siempre va antes que el diseño

Siguiendo con la lógica del punto anterior pensaremos siempre en el contenido antes que en el diseño. Lo más importante es que tengas claro el mensaje que quieres enviar y luego ya lo pondremos todo bonito.

Es mejor que llegues a la reunión con un cliente con unos vaqueros, una camiseta y un gran producto, que llegar con un traje de 2000€ y un producto que no hay quien lo compre.

¿Ves por dónde voy? Primero consigue un producto y un mensaje potentes, luego ponte el traje. Internet está lleno de blogs con diseños obsoletos, pero con información valiosa. Mientras aportes valor la gente irá a tu web, aunque el diseño no sea el más cuidado del mundo.

La importancia del copywriting en tu homepage

A la hora de generar los contenidos para crear tu página de inicio te recomiendo que analices los siguientes puntos:

Quiénes son tus clientes

Este tema te puede parecer una obviedad, pero debes tener clara la edad de tu cliente, su poder adquisitivo, sexo, nivel educativo, gustos e intereses, las redes sociales en las que se mueve, etc.

Esa información marcará:

  • El tono en el que te comunicarás con él, no te puedes dirigir igual a un joven de 20 años sin estudios que a un ejecutivo de 45.
  • El tipo de producto que vas a ofertar.
  • Las cualidades que quieres destacar de tus servicios.

Si tienes claro cuál es tu cliente serás capaz de definir mucho mejor el mensaje y por tanto las posibilidades de que éste sea efectivo se multiplicarán.

Cuáles son sus problemas

Lamento decírtelo pero tú no tienes el poder de crear necesidades en los demás y por tanto no puedes vender lo que quieras, tienes que vender lo que tu cliente necesita. Si quieres tener un negocio exitoso primero necesitas identificar los problemas de tus clientes y luego ser capaz de aportar una solución.

Si decides lanzar un proyecto sin conocer las necesidades del cliente y luego resulta que no hay una demanda real del producto que vendes, tu aventura empresarial durará muy poco.

Para ilustrar este punto te voy a poner mi propio ejemplo. Cuando empecé como diseñador freelance ofrecía todo tipo de servicios relacionados con el diseño (logotipos, identidad corporativa, infografías, 3D, animaciones, diseño web, diseño publicitario, etc.), básicamente porque no tenía ni idea de cuáles eran las necesidades reales de mi cliente.

A día de hoy solo ofrezco una serie de servicios muy concretos y le doy toda la prioridad a WordPress. Ahí está mi cliente. Mi cliente necesita una web y más concretamente un tipo de web que pueda gestionar el mismo y que esté preparada y diseñada para generar ingresos.

Eso es lo que hago. No hago webs de directorios de anuncios ni hago diseño 3D. Hago lo que he visto que me demandaban más y me esfuerzo porque mi página de inicio ofrezca respuestas y soluciones a ese tipo de cliente.

Todo lo que mi cliente no demanda lo he descartado. No tiene sentido que me empeñe en intentar vender un producto que no me pide nadie.

Qué soluciones puedes aportarles

Si has identificado correctamente a tu cliente y conoces sus necesidades no debería costarte demasiado diseñar una solución para él.

Ahora toca presentarla en tu página de inicio de una forma clara y concisa. Mi consejo es que te centres en el beneficio que obtendrá el cliente.

Si te fijas en mi homepage la frase que se lleva todo el protagonismo es “Aprende a hacer tu propia web con WordPress”. Desde el primer instante dejo claro qué beneficio va a conseguir el usuario que llega a mi sitio.

Este debe ser el elemento con mayor protagonismo de la página, así que destácalo como se merece e intenta no eclipsarlo con imágenes llamativas, colores chillones o cualquier otra cosa que distraiga la atención del usuario (botones, cajas, enlaces, etc.).




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10 Abr 2017

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Cómo elegir el tema y el hosting para tu WordPress
por nvhosting

Cómo elegir el tema y el hosting para tu WordPress son dos cuestiones fundamentales que deberás tener en cuenta si quieres que tu web empiece con buen pie. Si te equivocas siempre podrás rectificar más adelante pero perderás tiempo y te llevarás algún que otro disgusto por el camino. Ten en cuenta los siguientes puntos a la hora de elegir y acertarás en la decisión.

Las virtudes de WordPress son de sobra conocidas, por eso es tan popular y por eso hay tanta oferta relacionada con este gestor de contenidos. El problema viene cuando tenemos que decidir entre tantas opciones, hay muchísimos sitos de temas para WordPress y lo mismo pasa con los servicios de alojamiento. En esta infografía te enseño los factores que considero relevantes a la hora de tomar las decisiones adecuadas y no dejarte llevar por los diseños preciosos, los precios de risa, las características increíbles, etc. Si te parece interesante y quieres compartirla puedes hacerlo fácilmente insertando en tu página web el código que encontrarás al final de esta entrada.

Cómo elegir el tema para tu WordPress

1. ¿El tema encaja con el propósito de la web?

Tu web puede ser un blog, un periódico o magazine, un portfolio, una web corporativa o una tienda virtual. Asegúrate de que el tema tiene las características necesarias para que cumpla su función. De nada te servirá un tema con un diseño genial si luego no te sirve para lo que necesitas. En las webs donde se venden temas premium suele haber categorías, utiliza los filtros para encontrar los temas que de verdad te pueden servir.

2. ¿Es un tema Responsive?

Cada vez más gente navega por internet a través de smartphones, tablets, etc. Si tu web se ve mal o va lenta en estos dispositivos perderás audiencia. Muchas veces es desesperante navegar por una web que no está optimizada para dispositivos móviles y los usuarios tenemos muy poca paciencia, si tu web no va bien se irán a otro sitio.

3. ¿El tema carga rápido?

La velocidad de una página web es un factor valorado por Google de cara al posicionamiento y muy apreciado por los usuarios. A nadie le gusta esperar así que asegúrate de que el tema no va a ralentizar la página. Los desarrolladores de temas suelen tener una versión online para que la gente los vea y navegue por ellos antes de adquirirlos. Utiliza herramientas para ver los tiempos de carga, también podrás analizar si el tema tiene estructuras o defectos que perjudicarían la velocidad de la web.

4. ¿Tiene buen soporte? ¿Lo actualizan frecuentemente?

Es importante que esté bien documentado para que lo puedas configurar correctamente, que el soporte sea rápido y eficaz por si surgen problemas y que lo actualicen a menudo para arreglar pequeños desajustes. En el momento de instalar el tema y configurar todas las opciones para que adquiera el aspecto que deseamos ayuda mucho el tener una buena documentación que nos guíe paso a paso. Si aún así tenemos problemas podremos recurrir a los foros de ayuda del desarrollador o enviarle un ticket con la consulta. Debido al alto ritmo de actualizaciones tanto en los plugins como en el mismo WordPress es aconsejable que el tema también lo actualicen frecuentemente para que siempre funcione como debería.

5. ¿Cuida el SEO?

En realidad con que no lo estropee es suficiente. WordPress ya tiene una estructura optimizada para el SEO. Además, probablemente más adelante instalarás algún plugin para mejorar este punto, así que con que el tema tenga un código limpio debería bastar. No recomiendo temas con mucha optimización sobre el SEO por varias razones, primero porque hay herramientas (plugins) especializados para tal efecto que pueden hacerlo mejor, además, si cambias el tema perderás los ajustes que habías hecho. Por otro lado podría pasar que los ajustes del tema entren en conflicto con los ajustes del plugin para SEO y al final tengas más problemas que soluciones.

Cómo elegir el hosting para tu WordPress

1. ¿Cómo es el soporte al usuario?

Este es el punto más importante con diferencia. En la elección del tema el soporte es importante, pero en el hosting es crucial. Antes o después tendrás problemas y necesitarás que te los resuelvan. Evítate dolores de cabeza y contrata un hosting con soporte rápido y eficaz.

2. Memoria y procesos para Php

WordPress, al igual que los demás gestores de contenidos, consume memoria y cuanto más compleja sea la web y más plugins tengas instalados más consumirá. Contrata al menos 128-256MB para ir tranquilo al principio, aunque si la web crece mucho necesitarás más. Este es un punto muy importante para que la web funcione correctamente. Piensa en el siguiente caso, tienes un hosting con poca memoria, una web que aún no tiene mucho contenido ni mucho tráfico por lo que la capacidad y transferencia que te da tu hosting son más que suficientes para el día a día, de repente publicas un artículo en tu blog que se vuelve viral y te llegan muchas visitas de golpe, ese día la escasa memoria contratada puede hacer que la web se caiga. Y no importa que vayas sobrado de capacidad y transferencia porque si tienes muchos plugins, muchas visitas en un momento puntual o ambas cosas a la vez la web puede no ser capaz de aguantar los picos de consumo.

3. ¿Servidor Linux o Windows?

Linux. Si no tienes un perfil técnico puedes tener la tentación de coger un servidor Windows por el simple hecho de que en tu ordenador tienes Windows y Linux no lo conoces. No voy a entrar en detalles, solo te diré que los gestores de contenidos como WordPress funcionan mejor en un entorno LAMP (Linux Apache, MySQL PHP). Por lo tanto es mejor trabajar con servidores Linux.

4. Capacidad y transferencia mensual

Si tu web tiene muchas imágenes (un portfolio, periódico, tienda virtual, etc.) necesitarás una buena capacidad y transferencia. Si tienes un blog personal o una web corporativa necesitarás menos recursos. Como al principio no sabrás qué capacidad ni transferencia mensual vas a necesitar, te recomiendo que leas el punto 5.

5. ¿Es un hosting escalable?

Como decía en el punto 4, al principio no podemos saber cuánto contenido ni cuántas visitas tendrá la web y por tanto no sabremos que capacidad y transferencia mensual vamos a necesitar por lo que yo recomiendo empezar con un hosting “sencillo” pero bueno, si éste es escalable más adelante podremos ampliarlo en base a nuestras necesidades. Puedes coger el plan más básico de un proveedor de confianza para ver cómo va la cosa, cuando veas que se queda pequeño lo podrás aumentar fácilmente y de forma casi inmediata.




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